Dirijámonos
ahora a nuestro observatorio virtual para tomar espectros de una serie
de estrellas de nuestro cielo. Como ya estamos acostumbrados a hacer,
debemos empezar seleccionando la práctica adecuada y el telescopio
correcto.
Puesto
que necesitamos llevar a cabo espectroscopía, el instrumento
más adecuado es el espectrógrafo existente en uno de los
focos Nasmyth del telescopio de diez metros.
Al
abrir la cúpula nos llamará la atención el aspecto
del cielo que se puede contemplar por la abertura. En esta práctica
vamos a trabajar con estrellas muy brillantes, así que se nos
presenta el cielo no como se ve por el telescopio de diez metros, sino
como se ve por uno de sus pequeños telescopios auxiliares. Podemos
reconocer constelaciones completas. Así, en las coordenadas (410,
110) de la consola se encuentra la constelación de Auriga, y
en las (385, 440) la famosa constelación de Orión. Con
ayuda de un planisferio o un atlas celeste podremos reconocer sin problema
el resto de estrellas que van a ser objeto de estudio de esta práctica.
Si queremos, podemos navegar por este cielo (correspondiente al cielo
de invierno para un observador situado en la península ibérica)
y familiarizarnos con las constelaciones. Deberemos ser capaces de reconocer
a Sirio, la estrella a
del Can Mayor y la
más brillante del cielo en las coordenadas (245, 585). En (601,
206) tenemos al famoso cúmulo de Las Pléyades. Si aún
no tenemos claro la identificación del campo, la estrella Aldebarán
se encuentra en (513, 282).
Ahora
tomaremos el espectro de alguna de las estrellas más emblemáticas
y procederemos a clasificarlas espectralmente. Como referencia tomemos
una librería de espectros ya clasificados. En la figura se representan
una serie de espectros típicos de todos los tipos espectrales.
Se ha representado intensidad frente a longitud de onda. A este conjunto
de espectros de referencia se le denomina librería de espectros
estelares.
Empezemos
obteniendo el espectro de la estrella Sirio, el a de la constelación
del Can Mayor. Se encuentra en coordenadas (245, 585) y es fácilmente
reconocible pues es la estrella más brillante de todo el campo.
Una vez que hemos centrado la estrella en la rendija con el modo adquisición,
podemos pasar a la consola de medida y lanzar nuestra exposición.
Puesto que queremos los datos de la mayor calidad y se trata de espectros
y no imagen, no debemos ahorrar en tiempo de exposición. Será
necesario un mínimo de 900 segundos, o más si nos lo podemos
permitir. La ventaja de este espectrógrafo es que podemos ver
cómo se forma el espectro en tiempo real y detener la exposición
tan pronto como creamos que es suficiente.